Es esta la novela en que Conan Doyle dio a conocer al inmortal detective Sherlock Holmes, y al doctor Watson, su no menos genial narrador. Un cadáver hallado en extrañas circunstancias pone en marcha los reflejos deductivos de Holmes, mientras la policía oficial se pierde en divagaciones equivocadas o arresta a inocentes ciudadanos. Un nuevo asesinato parece complicar la historia, pero a Holmes se la aclara. Nuestro detective no sólo encuentra al asesino, sino que intuye la historia turbulenta que lo motiva: la de otros asesinatos ocurridos treinta años atrás y cuyos ecos llegan al presente, historia que constituye una segunda novela tan apasionante como la primera. [Edición anotada, con presentación y apéndice]
Arthur C. Doyle
Arthur Conan Doyle nació en Edimburgo en 1859, en una familia donde casi todos destacaban en alguna actividad artística. En su ciudad natal se educó en una escuela pública y después pasó a un colegio de jesuitas, donde conoció bien a los prosistas latinos y a los clásicos ingleses, principalmente a Shakespeare. Posteriormente, estudió Medicina en la Universidad de Edimburgo hasta 1881. En 1886 termina de escribir Estudio en escarlata, donde definía el personaje de Sherlock Holmes, quien protagonizaría muchas de sus historias hasta 1926 (El signo de los cuatro, El sabueso de los Baskerville, Las aventuras de Sherlock Holmes...). No obstante, Doyle también creó otros personajes singulares, como el profesor Challenger (protagonista de varias novelas, entre ellas El mundo perdido), y escribió novela histórica, que según confesó era su máxima aspiración literaria. En 1902 recibió del gobierno el título de Sir, y falleció en 1930 en Crowborough (Inglaterra) de un ataque al corazón.
Asignatura
Temática
Misterio y terror
Realismo - Realismo mágico
Policiaco - Novela Negra
Educación en valores
Amistad, amor, lealtad
Empatía, tolerancia, justicia
Aprendizaje, conocimiento, sabiduría
Creatividad, autoestima, iniciativa, valentía