Holmes y Wattson viajan al valle de Sussex, donde un caballero americano que reside en Inglaterra ha sido violentamente asesinado en su mansión, una antigua fortaleza aparentemente inexpugnable. En esta primera parte del libro, encontramos todas las características del género detectivesco: un muerto que plantea infinidad de interrogantes, un despacho repleto de sangre y de pistas desconcertantes, una servidumbre aterrada, una viuda y un amigo de confianza sobre los que recaen sospechas de infidelidad. El resultado de la investigación nos traslada al otro lado del Atlántico, a las minas de Pensilvania y a una sangrienta sociedad secreta... La segunda parte se desarrolla en Estados Unidos y en ella se explican los aspectos ocultos que motivaron el crimen hasta quedar ensambladas todas las piezas del argumento.
Arthur Conan Doyle
Arthur Conan Doyle nació en Edimburgo en 1859, en una familia donde casi todos destacaban en alguna actividad artística. En su ciudad natal se educó en una escuela pública y después pasó a un colegio de jesuitas, donde conoció bien a los prosistas latinos y a los clásicos ingleses, principalmente a Shakespeare. Posteriormente, estudió Medicina en la Universidad de Edimburgo hasta 1881. En 1886 termina de escribir Estudio en escarlata, donde definía el personaje de Sherlock Holmes, quien protagonizaría muchas de sus historias hasta 1926 (El signo de los cuatro, El sabueso de los Baskerville, Las aventuras de Sherlock Holmes...). No obstante, Doyle también creó otros personajes singulares, como el profesor Challenger (protagonista de varias novelas, entre ellas El mundo perdido), y escribió novela histórica, que según confesó era su máxima aspiración literaria. En 1902 recibió del gobierno el título de Sir, y falleció en 1930 en Crowborough (Inglaterra) de un ataque al corazón.
Asignatura
Temática
Aventuras y viajes
Misterio y terror
Policiaco - Novela Negra
Educación en valores
Creatividad, autoestima, iniciativa, valentía
Aprendizaje, conocimiento, sabiduría